Siguen las aventuras de Arímnestos, el héroe de Platea. Sus batallas y sus líos amorosos. Al igual que en Sangre guerrera se cuenta de manera entretenida y sin más pretensiones diferentes batallas y escaramuzas en esta ocasión entre griegos y persas. Sigue el mismo ritmo que el primer libro y sin demasiados elementos nuevos, la mayoría de los personajes se repiten y los que aparecen nuevos no aportan demasiada originalidad por lo que esta segunda entrega pierde frescura en ese sentido.
El título de Maratón puede llevar a engaño porque la batalla se cuenta al final del libro, y es un libro muy extenso. Tan al final se cuenta que empecé a sospechar que esa batalla se relataría en una tercera entrega. En cualquier caso aquí no se terminan las andanzas de este héroe.
Si bien la batalla de Maratón que da lugar al título ocupa una parte muy pequeña en el total de la historia está relatada de manera muy clara, casi cinematográfica, a la vez que se ensalza el poder de la unidad entre diferentes clanes y pueblos que apartan sus rencillas personales para hacer frente a un enemigo común. Muy bonito y muy edificante pero si se hubiera contado con menos páginas tampoco habría pasado nada.
Si bien la batalla de Maratón que da lugar al título ocupa una parte muy pequeña en el total de la historia está relatada de manera muy clara, casi cinematográfica, a la vez que se ensalza el poder de la unidad entre diferentes clanes y pueblos que apartan sus rencillas personales para hacer frente a un enemigo común. Muy bonito y muy edificante pero si se hubiera contado con menos páginas tampoco habría pasado nada.
Kirke
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